domingo, 1 de junio de 2008

La banda sonora de nuestras vidas 1


Os hablo de un disco. La música es la banda sonora de nuestras vidas, y este disco no solo fué la banda sonora de una época de mi vida, la modificó para siempre. Esto es como: "lo que comes es lo que eres". Yo en el fondo soy este disco. Le recomende a la chica con la que salía con 17 años, que se comprara este disco, sin haberlo yo ni siquiera olido, la piba me hizo caso atendiendo a mi buen oído musical, yo por aquél entonces lo único en metálico que llevaba en los bolsillos era una chapa de coca cola. Menuda verguenza para un galán como yo. Era un doble vinilo, le costó su dinerito, cuando escuchó la primera canción, me llamó muy enfadada, -¡Ángel pero que mierda me has hecho comprar!-.
Efectivamente eso mismo creía yo cuando lo escuché por primera vez - ¡Joder, que mierda le he hecho comprar a esta tía-. Creo que a partir de ahí las relaciones fueron cada vez a peor, perdí
una piba pero gané un disco que era una auténtica maravilla, de lo cual me alegro hasta el infinito, porque el vinilo tenía mas calidad que mi ex (jaja, que se chinche). Digo lo gané, porque antes de tomar cada uno su desviación en la carretera, me pidió hasta el útimo de sus discos prestados, pero ya había descubierto que no podía faltar "The lamb" en mi colección.
Al final cada cosa vuelve a los suyo, y es irónico como ese mismo disco, me ayudó a pasar
el mismo bache, después de que nuestra relación se hundiera en el mas profundo de los abismos
( pues yo creía por aquel entonces que era el capitán nemo).
Al principio no entendía nada, cuando lo escuchaba, pero poco a poco me empezé a enganchar
a los surcos de este disco, que está considerado unos de los mejores discos de la historia del rock.
"The lamb lies down on broadway", de Génesis ( 1974), sencillamente para mí, parte ya de mi
existencia.
Una obra maestra con todas las letras, con infinitos niveles de lectura, el viaje psicodélico y metáfisico de un portoriqueño llamado "Rael", que intenta hacerse conocido con sus grafittis
en pleno Nueva York. Una obra llena de desbordante imaginación.
En él, había tipos tan innovadores como Peter gabriel y Brian Eno a la producción, además de los componentes de Génesis. Con pasajes insufribles y canciones de extrema belleza,
sus sonidos extrámbóticos elevan tu mente a otra dimensión, muy recomendable para escuchar por la noche con cascos y los ojos bien cerrados (y la puerta del piso bien cerrada no vaya a ser que mientras flipes se lleven tu nevera), entonces canciones como "Silent sorrow on empity boats" pueden hacer despegar tu alma del cuerpo.
posdata: Si os parece un disco tan insufrible como para abandonar a vuestra pareja, ¡jajaja! lo mismo la piba esta tenía razón, lo mismo hizo lo correcto.

No hay comentarios: