VACACIONES AUTODESTRUCTIVAS 1

Pues si queridos amigos os prevengo de que un tipo desastroso anda por las playas de veraneo, si no que se lo digan a Alicia (mi novia) y la cara que se le puso cuando después de media hora de facturar una bellísima y espectácular ensalada fue a parar a la arena, al gritro de: ¡Me ha quedao de puta madre... Ostiiia!. En fin no hay hambre que no pueda solucionarse con un bocata de salchichón. Lo pero de todo fue cuando también se me cae el bocata a la arena, e intento quitarle esta con un calcetín sucio. Y la que liamos para montar la tienda, me entraron ganas de decirle al chino que me la había vendío, que me hiciera el favor de explicarme como coño se monta la puta tienda ¡Joder que yo solo tengo un fp2!. Llamé ami hermano que es ingeniero, pero tampoco me supo decirme como coño se monta, que él no sabía de trigonometría, binometría y el coñodesutía. Al final ócurrió el milagro y a las cuatro de la mañana logré montar el palacio de Backinghan de las entretelas y los palos del sombrajo, no quedó mal, solo le faltó un suelo de porcelanosa. Otro rollo fué poner una sombrilla en medio de un huracán,
sobre todo si tu parienta se empeña por cojones, en que se quedé de pie.
Yo solo quería comer tranquilo, mientras mi querida piba luchaba contra la sombrilla. Al cuarto de hora me dijo - ¡Tu comiendo y no me ayudas!
Total se me inflaron las gonadas, el epigastrio y todo aquellos apendices propensos a la inflada, me levanté y la ayudé. Cogí la sombrilla y la metí de un tirón dentro del coche, desde entonces no quiero ver ni el paraguas de Mary Poppins. Odio todo aquello que tenga tela y palillos retractables.
Pero todo no acaba aquí, lo que acaba aquí es mi tiempo de desahogo, así que hasta la próxima, ¡No se vayan todavía aún ahí mas, mucho mas!